Singapur castigará con azotes a personas que consuman y vendan cigarros electrónicos

En una decisión que ha generado controversia internacional, el gobierno de Singapur anunció que impondrá castigos físicos, incluidos azotes, a quienes consuman o comercialicen cigarrillos electrónicos en el país.

El Ministerio del Interior detalló que las sanciones se aplicarán a reincidentes y casos graves, en los que se detecte venta ilegal a menores o distribución masiva.

Asimismo, informaron que quienes sean sorprendidos usando vapeadores, enfrentarán multas de hasta 2 mil dólares de Singapur (mil 555 dólares estadounidenses), mientras que los distribuidores de vapeadores de etomidato podrán ser castigados con un máximo de 20 años de prisión y ‘azotes’ con varas de caña por vapeo.

La legislación singapurense ya era una de las más estrictas del mundo en materia de control del tabaco y sustancias inhalables. Sin embargo, esta nueva disposición marca un giro punitivo que ha sido criticado por organizaciones internacionales de derechos humanos, que consideran que el castigo físico vulnera principios fundamentales.

Por su parte, el gobierno defendió la medida como “necesaria y proporcional” ante el aumento del consumo de vapeadores entre adolescentes, y aseguró que se trata de una estrategia disuasiva para proteger la salud pública.